Suena el silbato de un tren
en la lejanía de las vías.
Anuncia su llegada,
su parada,
su partida.
Anuncia el fin
de la espera esperada;
el final de un trayecto,
el principio del todo
o quizás de la nada.
Suena el silbato de un tren
que se aleja para siempre
de la vieja y cansada estación
que yo creí propia
sin serlo en realidad,
porque de uno no hay nada.
Suena el ruido de un tren
que recorre siempre la misma ruta
de planas llanuras
y de altas montañas.
Deja oír su marcha,
para que se sepa que se acerca;
o que se para;
o que se aleja.
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© 2012– texto y fotografía.- José Ignacio Izquierdo Gallardo
2 comentarios:
Has conseguido que visualice ese tren que tantos significados puede tener.
Gracias, es bello.
Un abrazo.
Gracias Mcarmen. Como bien dices... muchos significados... muchos.
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